La serie infinita de cambios; se siguen sucediendo en este constante presente, me ha traído hoy hasta este, el único lugar posible donde estar. Me descubro desnudo, desprovisto de ambiciones superfluas y liviano, sin nada que cargar. Predispuesto, como abraza el instante al tiempo. Amoroso, como la noche que envuelve a la luna y la deja brillar. Me descubro en paz, la paz que sucede y acontece de la coherencia, de la indescriptible cesación de toda búsqueda. Sumergido en la intransferible experiencia de vivir conscientemente cada instante. Algunos pueden verme y ser ese destello de luz que se multiplica cuando más se comparte, otros, aun sin poder verlo, son testigos de las potencialidades. Mi vida se ha vuelto un perpetuo experimento sobre mí mismo y acontece diariamente un entendimiento mayor, que simplemente sucede, que sencillamente está ahí todo el tiempo, al alcance solo de quienes logran dominarse a sí mismos. El alma y el corazón están dispuestos, y en constante expansión.

sin miedo

Su mirada me desnuda. A veces coincide con mis ojos expectantes y en ese efímero instante puedo verme completo en sus ojos. Su alma me interroga sin mediar palabra, el sutil gesto de sus manos me invita, a perderme por completo, a entregarlo todo otra vez. Ud. me mira así y no sé si es consciente de lo que en mi genera, tenue calma por fuera, intensa tempestad por dentro. Cierro mis ojos y puedo abrazarla con el alma, y Ud. me mira dándome alas, invitándome a la aventura de existir, a desbordarle el alma y a amarla sin medida, sin límite, sin miedo y sin piedad. Eso que me piden sus ojos, permítase vivirlo, déjelo salir si Ud. se quita el manto del miedo yo la acompaño a existir.

me quedo

Me quedo un par de velas sin usar, algunas facturas sin pagar, un silencio del que no se habla, la caricia congelada y tus pasos desvelados dando vueltas por la casa. Una interminable bitácora de viajes inconclusos, un diario subrayado con proyectos y ruinas, un lirio florecido en el balcón. Me quedo el corazón con las puertas abiertas, un resfrió de amor, unas idas sin vueltas, la costumbre de entregarlo todo sin pedir si quiera una respuesta. Un paseo con mascotas, unos jeans que nunca use, un mándala en la ventana, una foto sin color. Un reloj que se detuvo, un calendario en la heladera, un libro nuevo de recetas, tu confianza sin confiar. Me quedo el sin sabor de abrazar al viento sin medirme. Un boleto de avión, una casa sin puertas, la ventana entreabierta, un cajón sin abrir, tu mirada y el miedo de quererme sin entrega. Me quedo mas amor y un alma mucho más dispuesta.

MEMORIAS

Guárdame en ese baúl de tu memoria, donde aferras las cosas que fueron tus sueños, donde dejas guardado recuerdos de esos que pueden robarte el aliento. Quiero que conserves, todas las mañanas donde al despertarte sólo te abrazaba, y las tantas charlas, entre miradas, donde desnudaba mi alma entre tus palmas. Déjame decirte, que te he sido honesto, aun en el silencio y la voz apretada, que cuando te tuve, nada fue tan nuestro, como ese momento de amarnos sin tiempo, quiero que conserves esas madrugadas llenas de aromas a besos y alas. Guárdame en tus ojos, en el hueco de tu espalda donde puse todas mis ansias anheladas, y si pasa el tiempo, sin daños por años, mírame sonriendo no me des la espalda. Guárdame ese llanto, a solas con la almohada, que no es por tristeza es amor que se derrama, y si no consigues ser lo que deseabas, abre ese baúl donde me encontrabas, yo estaré sonriendo, y siempre dispuesto a darte mis alas cuando estés cansada. No permitas nunca, que alguien te apague, porque si eso pasa, no habré sido nada

Cuando todo vuelva

En esta era de hipocresía, la honestidad del espejo es un oasis en pleno desierto. Las aguas están en calma y puedo ver lo que habita en el fondo, lo profundo; ese tesoro del alma. Desde ese lugar es donde vivo y respiro, desde ahí te amé.
Cuanto todo pase, cuándo todo vuelva, en alguna noche sin luna pensaras en mí, en mi amor, en esa profunda honestidad donde me sumergí. Abrázame cuando me recuerdes, abrázame y yo lo sentiré, sentiré que al fin lo has comprendido, sentiré un poco de paz por haberte amado, sentiré que no fue en vano haberte dado lo mejor de mí. Cuando todo vuelva, pues el amor honesto vuelve multiplicado, sabré que existe, entre lo infinito y lo infinitesimal, esa inmensa compasión que unifica todo, que despierta esta ilusión de estar viviendo, sin saber muy bien porque. Entenderás mis silencios y mis sonrisas, el enorme amor detrás de cada acción, el hermoso acto de dejarte ir.

AMOR FLUYENDO

Puedes, si es que en verdad quieres, pero no lo hagas por mí, hazlo por ti, al fin y al cabo la felicidad y el amor pasan dentro de ti. Vive, ama y vuela libre, yo seré a penas, un privilegiado espectador. También puedes elegir no hacerlo, tampoco te detengas por mi, no me conviertas en la excusa que justifica tus miedos. Puedes elegir, si lo haces desde una mente confusa el miedo guiara tus elecciones, si, en cambio, te dejas fluir por una mente en calma al servicio de un corazón sincero, lo que sea que hagas serán acciones de amor. Lo que te une o te separa, es, a penas esa conciencia interior. Puedes abrazarme, a veces los corazones necesitan acercarse para ser un mismo latir. Siénteme, disfrútame y suéltame. Tu abrazo no me pertenece, así como el agua no le pertenece a las nubes y cae, en forma de lluvia, para volver a subir. Siempre volveré a tus brazos si permites al amor fluir

mis letras y usted

Mientras Ud. lee y yo escribo, se crea un espacio en común, donde ambos podemos existir. Y recorre su mirada mis letras como acaricia las hojas el viento. Y escribo sobre su piel, las más improvisadas palabras de amor, la más hermosa coincidencia. Escribo para abrazarla, porque es la única manera que tiene mi alma de besarla. ¿Puede sentirme?¿o son sólo sus ojos sobre esta sucesión de palabras? Y si pudiera en verdad tocarla, si acaso mis palabras salieran del papel para acariciarla. Entonces Ud. podría amarse. Entonces yo podría tener alas. Mientras Ud. me lee y yo escribo, se confabulan los hilos mas rebuscados del universo, para que a su orilla llegue lo que hoy precisa oír, y yo pueda decirle lo que habla atreves de mí. Mientras escribo y Ud. lee, sucede la vida, la conexión, un instante intenso de amor.

Sin embargo el amor

Quise ser el viento que impulse tus alas, pues de eso se trata realmente volar. Quise acompañarte en tu vuelo, sin embargo tú, elegiste el miedo. Quise invitarte a descansar, como a veces solías hacerlo, sobre mis brazos; y sentir que la vida cabe en un sólo instante nada es real, ni antes, ni después, sin embargo preferiste el miedo. Intente ser verbo, pues así se expresa el amor, no en palabras sino en acción. Quise escribir el poema de tu manos y dejarlo a fuego impreso en tu piel, para que puedas leerme el alma a penas puedas, y decidas querer; sin embargo tú, elegiste el miedo. Elegiste el miedo porque es lo ya conocido, lo mamado desde el vientre, lo que fue creciendo contigo. Siempre es más sencillo seguir en el camino transitado que arriesgarte a lo desconocido, a lo nuevo, a la aventura de existir. Sin embargo, el salto, ese salto al abismo, que requiere romper los miedos y del que ya no hay vuelta atrás, ese, justamente ese, era lo único que podría liberar, que podría despojarte de ese pesado equipaje que tú misma decidiste llevar. Sin embargo el amor, sucede ahí, mientras saltas, mientras todo se derrumba y se esfuma, mientras caes y vas descubriendo que tenias alas, y aprendes a usarlas, y sientes el viento acariciar tu cara, sin embargo el amor, sucede ahí, en ese constante presente donde la vida ocurre, permanentemente ocurre, intensamente ocurre, amorosamente ocurre. Sin embargo ese salto al vacío que mi amor te propone, no precisa de tus miedos, ni los míos, ni de nada más. Sólo salta, sólo ama, sólo vive la vida que late en tus venas exigiendo salir. Sin embargo el amor, ese que tanto anhelas descubrir, se encuentra del otro lado de puente, que nunca te atreviste a cruzar. Sin embargo amor, te quedaste en tu orilla, sin embargo el amor aun te extiende las alas.