Suspiros acumulados

Mis letras llegaron a su destino y pude, gracias a Dios, tener noticia tuyas, conocí tu voz y todo lo que detrás de ella pude presentir. Reconozco, lo se, que al leerme ahora también conoces mi rostro y algo mas de mi, pues esta carta tengo intensiones de entregarla personalmente. Te preguntaras por que estoy volviéndote a escribir, es muy sencillo, me gusta tener la mente ocupada pensando en vos y quisiera regalarte de mí, los más sinceros pensamientos. El tiempo paso tanto como pasaron los minutos sin pedir permiso a las horas, así me pasan también los pensamientos sobre vos. Confieso que te miré ,una tarde de tantas y te vi con la mirada perdida como soñando quién sabe que cosas, en ese momento me pregunte si esa mirada dulcemente perdida tendría dueño y hasta me anime a desear un segundo esos ojos puestos en mi, un minuto de tus pensamientos dedicados solo para mi. Sé que pude con mis letras y con mi voz hacer que me pienses un poco, por curiosidad, por misterio, no se realmente por que, pero pude presentirlo estuve un instante en tu mente y es, confieso, un lindo lugar donde estar. Me gusto estarlo. Pensé que en esta pequeña cuidad la suerte y el tiempo se confabularían para crear una oportunidad, una coincidencia, un golpe de suerte y nos encontraría por esas casualidades, no importa en donde, pero solo una casualidad. Las cosas no son tan sencillas y hasta al otoño le llego el invierno y, mas allá de mis intentos, no podía encontrarte en ningún lugar y confieso que te buque. Se me ocurrió pensar, con cierto pesimismo tal vez, que las cosas por algo no se dan, pero como suele suceder, las esperanzas siempre me ganan y, obstinado, tenia que hacer algo al respecto los espacios que ibas ocupando en mi mente eran cada vez mas grandes y casi sin quererlo, me desperté una mañana temblando al darme cuenta que la había soñado Ahora conoces mi rostro, mi voz y bastante más de mí, ahora sabes de mis entonces anónimos pensamientos. Lo cierto es que las distancias se acortaron, afortunadamente para mí, y confió en que algo bueno va salir de todo esto, con tener la posibilidad de conocer el poema detrás de sus ojos, estaría más que contento. Me animo a decirte que presiento tu sensibilidad, ternura e intuición y hasta me arriesgo a decir que notas la intensidad de mis palabras, detrás de mi voz y por supuesto, la misma que impregna cada segundo de mi vida. Con todo esto me estoy dando la posibilidad a mi mismo de dedicarte mi tiempo, todo el necesario, la vida entera si eso es suficiente a saber de vos y nada me gustaría mas que también vos te dieras la posibilidad, darte un poco de tiempo para conocer al hombre detrás de todo esto, de seguro encontraras algunos de mis suspiros acumulados, algunas cosas que creíste perdidas y por supuesto un hermoso momento guardado en el cajón de los mas memorables momentos por vivir. PD: cenaría conmigo Srta.?