Por si te enfrias

Deje colgado en tu placard, el aroma de una mañana apasionada por si no quieres depertarte y quedas dando vueltas en la cama, te guardo un domingo para cuando sea larga la semana y quieras cualquier día sacarlo de mis manos y pintar de ocre y otoño este paisaje cotidiano. Te dejo ese respeto que ganaste a fuerza de asumir responsabilidades cuando al fin te cansaste de echar culpas al espejo. Te dejo esa sonrisa, que le da brillo a tus ojos profundos cada vez que me miras. Al lado de mesa de luz deje ese sueño que una vez soñamos por si quieres volver a soñar de nuevo cuando ya no tengas que soñar. Te dejo un camino hacia mi boca, una lagrima secándose al sol, una luna tímida que se asoma, la yema de mis dedos que te toca, la canción del viento que susurra. Por si un día de estos entiendes, te dejo el corazón para que se lo expliques. Por si decides por fin ganarle al miedo y dejar de mentirte mientras te peinas en las mañanas, cuando te animes a dar sin esperar de mi nada, por si te llega mi canción desesperada y te arriesgas a mostrar las cosas que me guardas bajo tu almohada. Te dejo el mapa de mis memorias, para que me encuentres cada vez más seguido en tus pensamientos por si te tardas en volver.